El problema con los “ISMOS”

Parto por decir que yo no sigo una religión marcada, si debo admitir que practico muchos rituales y experiencias variadas, desde culturas como la celta, vikinga y hasta oriental. Pero creo que lo que marca mi camino es la carencia de una religión o un “ISMO” en particular. Sigo un camino propio con la premisa de la libertad, no soy un “liberalista” ni sigo el “liberalismo”, por si acaso ajajaja.

La libertad que me mueve es la de pensar, de decir y hacer todo lo que estime conveniente para mi camino personal, mi auto descubrimiento y mi perfeccionamiento por decirlo de alguna forma, o sea hago todo aquello que me nazca y me diga mi intuición. Puede sonar conveniente, patudo y hasta caprichoso, pero no se engañen, vivir en completa libertad de acción crea mayores responsabilidades para alguien que sigue este camino de manera conciente y con un objetivo fijo.

Lo bueno de no seguir pautas pre-establecidas por los famosos “ISMOS” (terminaciones para cualquier movimiento que se vuelve masivo y externo), es que no existen los arrepentimientos ni las culpas van a parar a otros. Todo el poder y responsabilidad recae en uno mismo y por lo mismo se le debe tomar el peso a cada decisión. Como ven, el camino de la absoluta libertad tampoco es tan libre, pero al menos deja tranquilo el pensar que todas aquellas cosas que me suceden o sucederán las elegí completamente por mi cuenta y conciente de las consecuencias y responsabilidades que mis decisiones y actos acarrean.

Hay muchos “ISMOS” que proclaman la libertad de sus seguidores, pero pobre de aquel que rompa una de las reglas establecidas. Puede que los líderes de aquel “ISMO” no digan nada, pero hay que tener en cuenta que el silencio también comunica y a veces puede ser mortal. Cuando ocurre esto la generación de culpas es ineludible.

Uno puede seguir un “ISMO” pensando que cada paso lo elige uno, pero mucho de lo que haces finalmente es un mero reflejo de los primeros en formar el “ISMO” lo cual no se adapta ni adaptará jamás a tu propio camino sino al de ellos (y a veces ni eso).

Creo finalmente que en este mundo lleno de “ISMOS” o grupos lo que menos apuntan es a la real integración de la humanidad, simplemente sirven para fragmentarla aún más. JUDAÍSMO, CATOLICISMO, ISLAMISMO, HINDUISMO, TAOISMO, FEMINISMO, MACHISMO, RACISMO, MAOÍSMO, BUDISMO, ESOTERISMO, PAGANISMO, SATANISMO etc. Todas estas formas de “ISMOS” tienen miles de seguidores (quizá esa es la palabra que no me agrada de estos “ISMOS”, rebaños de gente), pero muchas o la gran mayoría funcionan con temor de no romper las reglas, además fragmentan a las personas más que unirlas ya que muchas de ellas “impiden” el tener buenas relaciones con otros que no sean de la misma línea.

Espero no suene a contradicción, aunque en muchas formas es inevitable ser contradictorio cuando se habla de gustos y pensamientos al no haber un patrón marcado en ellos. Me agrada la idea de la variedad y de la individualidad, no así las fusiones de cosas ya que pierden más aun la esencia de lo que eran. Me explico con peras y manzanas literalmente: “Una pera puede ser amiga de una manzana y compartir el canasto, pero sería ridículo querer hacer una manzana con gusto a pera o vise versa ya que finalmente no serían nada, habrían perdido su esencia y con eso se habría perdido la variedad”. Por este tipo de ideas me llaman racista, pero es que a mi me agrada ver a individuos con las características puras de su raza, independiente de cual sea (negros, blancos, amarillos, etc.) Pero este gusto por las cosas tal cual son sin fusiones no va en contra de compartir y tener buenas relaciones, aunque lamentablemente en cuanto a razas eso acarree las fusiones y pérdidas que acabo de señalar.

Finalmente y retomando el tema de los "ISMOS", considero mejor quedarse con el verbo o con la raíz de la palabra como en los árboles. La gente siempre olvida las raíces y se enfoca en los frutos y las ramas que vienen a ser lo más florido y llamativo del árbol (en la mayoría de los casos), pero olvida que nada de eso aparece sin buenas raíces. Por eso es mejor ver las palabras sin el “ISMO” en ellas y decir a secas la raíz, comprobando si es que realmente se adapta a nuestro camino. Al menos es un sentir personal, no se que opinan ustedes.